“El principal desafío que tenemos como sector es lograr la seguridad jurídica, que es la base para la consolidación de proyectos y de ciudad”

  • Después de cuatro meses de haber asumido la gerencia de Camacol Bogotá y Cundinamarca, Alejandro Callejas Aristizábal tuvo que liderar la manera de enfrentar uno de los desafíos más grandes que ha tenido el sector y la ciudad. Un año después de los cierres de actividades y de todas las medidas que se han tomado para enfrentar la pandemia del Covid-19, hablamos con él sobre el camino recorrido y los frentes de trabajo en los que se debe concentrar el sector edificador en la región.

ALEJANDRO CALLEJAS

¿Cómo resume su gestión durante 2020, teniendo en cuenta que gran parte de este año tuvo que enfrentarse a la coyuntura presentada por la pandemia?

2020 fue un año bastante difícil. La llegada sorpresiva de la pandemia fue un reto personal, profesional y como sociedad que nos llevó a replantearnos la forma como veníamos haciendo las cosas. Al hacer una autoevaluación del trabajo y de los resultados que obtuvimos como sector, me sorprendo porque se han logrado dos cosas que considero fueron fundamentales. La primera fue lograr adaptarme con mi equipo de trabajo y con los empresarios, a pesar de los retos que nos impuso el trabajo virtual. El segundo fue la articulación con las administraciones locales y departamentales para proponer alternativas e implementar de la mejor manera la estrategia respecto a los protocolos de bioseguridad en todas y cada una de las obras que tenemos en Bogotá, un trabajo que nos permitió tener al sector activo muy rápidamente y mantenerlo así el resto del año.

¿Cuáles fueron los principales aprendizajes que le dejó el 2020?

Entre muchas cosas, aprendimos que la rigurosidad y el seguimiento constante nos permiten reformular a tiempo las estrategias para obtener mejores resultados; que la anticipación y coordinación, junto con el trabajo en equipo, son decisivas para enfrentar este tipo de situaciones; y, por último, confirmé esa teoría que dice que es en momentos de crisis que las personas y organizaciones demuestran su capacidad de adaptación y de reacción.

¿Cómo ha sido la respuesta de las empresas del sector en temas sociales, sobre todo en lo que tiene que ver con la atención a la pandemia?

Con total orgullo puedo decir que nuestras empresas afiliadas durante el 2020 estuvieron comprometidas y unidas para apoyar y participar en los programas sociales que buscaban atender la crisis sanitaria. Participamos en la alianza #EmpresasQueSalvanVidas, en conjunto con otras organizaciones gremiales y ciudadanas, con el objetivo de fortalecer el sistema hospitalario de la capital. También cuidamos especialmente a los trabajadores del sector, desde el inicio de la pandemia estuvimos comprometidos con el mantenimiento de los empleos formales para miles de hogares en la región. Además, durante la ola invernal, algunos de nuestros empresarios hicieron donaciones en especie para auxiliar a hogares que vieron afectadas sus viviendas. Así seguimos demostrando que somos un sector que le apuesta a la sostenibilidad tanto económica, como ambiental y social.

¿Cómo va el reto de fomentar la inclusión en el sector?

Somos un gremio que apoya y cree en la inclusión, la igualdad y las oportunidades para todos como un factor clave para la construcción de bienestar y ciudades de calidad. En el último trimestre de 2020, junto con la Alcaldesa Distrital y las Secretarías Distritales de Hábitat y la Mujer y la Organización Global Opportunity Youth Network (GOYN) de la Fundación Corona, lanzamos el programa Mujeres Que Construyen, con el cual hemos buscado fomentar nuevas oportunidades de acceso, desarrollo y permanencia para las mujeres en la cadena de valor de la construcción. El balance a la fecha es muy positivo, tenemos una mesa estratégica con empresarios del sector y en los próximos meses nos concentraremos en capacitar y promover el aumento de la oferta de oportunidades laborales para la mujer, además de entrar en una fase de diagnóstico con nuestros afiliados. Así que el reto de la inclusión va muy bien porque nuestros empresarios están comprometidos con este programa y creen firmemente en que la igualdad e inclusión laboral son objetivos no solo del sector sino de la ciudad.

Hablemos de los avances del sector en temas digitales. ¿Cuál es el mayor reto que sigue pendiente por resolver en temas de virtualidad?

Lo construido en este tema es muy positivo, pero queda aún mucho camino por recorrer. La realidad que nos trajo la pandemia nos demostró que necesitamos hacer de la tecnología la aliada número uno del sector constructor. Durante 2020, en un trabajo de conjunto con nuestras empresas afiliadas, pudimos evidencia que las herramientas tecnológicas fueron clave, por ejemplo, en los procesos de comercialización. Las empresas potencializaron sus herramientas web para trasladar sus proyectos a plataformas virtuales, además de  trabajar de la mano con las entidades financieras para apoyar a los usuarios en los procesos de solicitudes de créditos. Hoy un hogar puede hacer todo el proceso de selección y compra de su vivienda desde la seguridad de su hogar usando las herramientas tecnológicas. En temas de escrituración, tenemos ya funcionando completamente nuestra plataforma DEKin, la cual es pionera en que el proceso de creación, revisión y aprobación de minutas de compraventa de vivienda nueva en Bogotá se haga de manera virtual, articulando digitalmente la labor de los actores que intervienen en los procesos de escrituración: constructora, fiduciaria, notaría y entidad financiera. Seguiremos trabajando para que la innovación y la competitividad de nuestro sector sean protagonistas en los próximos años.

¿Cómo ha sido para el Gremio el trabajo con la administración distrital para mitigar el impacto que ha traído la pandemia?

Reconocemos que el trabajo de las administraciones para afrontar la coyuntura no es una tarea para nada fácil, puesto que evitar la propagación masiva del virus impactando lo menos posible la económica sigue siendo el mayor de los retos. Como sector tenemos que destacar ese trabajo, además de la disposición de las administraciones para escuchar y construir estrategias conjuntas. La articulación que logramos con el gobierno distrital y departamental, nos permitió ser un sector líder en materia de reactivación. Ellos han reconocido en este sector nuestro potencial para la generación de empleo seguro y el bienestar que aportamos a la sociedad. Es de destacar que gracias a la continuidad de la política de vivienda del gobierno nacional, y a las decisiones que se han adoptado desde el gobierno distrital logramos que el año pasado fuera un año histórico en ventas.

Pasó otro año y Bogotá no ha actualizado su Plan de Ordenamiento Territorial, ¿cómo va el proceso de participación y cuáles son las preocupaciones del Gremio?

En 2020 participamos en múltiples escenarios exponiendo nuestros análisis, observaciones y recomendaciones desde los componentes técnico y jurídico. En estos espacios hemos insistido en que Bogotá necesita formular un POT que asegure la planificación en el largo plazo (12 años), porque consideramos que este es un instrumento que debe trascender a las administraciones. Los POT no pertenecen a los gobiernos de turno ni al que tenga la responsabilidad de liderar su modificación, sino que pertenecen a la ciudad, y como representantes del sector seguiremos insistiendo en eso y en que debe estar basado en rigurosos estudios técnicos para así garantizar el mejor destino para la ciudad. En temas más sectoriales, venimos evidenciando la necesidad de establecer un modelo de ordenamiento territorial que incluya los retos evidenciados en el censo 2018 para la generación de vivienda de 1.1 millones de hogares nuevos a 2035, de ahí la importancia de sacar adelante los proyectos estratégicos de ciudad, para el cuidado de la estructura ecológica principal, entre otros. Además, reiteramos la importancia de brindar seguridad jurídica a la actividad como principio rector de toda democracia. Esperamos que este importante instrumento de planificación territorial se apruebe lo más pronto posible, pues de eso dependerá el avance de la ciudad.

También, esperamos generar un consenso alrededor de este importante instrumento de planificación territorial, ratificando nuestro compromiso en el acompañamiento y discusión del tema en todas las instancias donde se considere podemos aportar como sector.

¿Qué le dice a los críticos que acusan a Camacol B&C de haberse proclamado líder de los espacios de construcción y participación?

Existen sectores de la sociedad que tristemente buscan sacar beneficios políticos y desvían discusiones que deberían ser de carácter técnico para desinformar. Nosotros, como cualquier ciudadano, tenemos el derecho y la responsabilidad de participar en la discusión para lograr la consolidación del mejor  POT para Bogotá. Eso es lo que hemos hecho y por eso participamos activamente y de frente a la ciudadanía en los espacios que democráticamente se han abierto para este fin. Lo nuestro es hacer análisis técnico y jurídico, y en eso hacemos la tarea muy juiciosos en todos los espacios de participación que existan. Un POT no se formula para un sector en particular, como se quiere hacer creer. Este es un instrumento que necesita la ciudad para asegurar un desarrollo ordenado y sostenible. Entonces, mi invitación se extiende para que haya participación con estudios y haciendo seguimiento al trabajo que se realiza, la cual es una responsabilidad que todos tenemos como ciudadanos.

Además de la reactivación económica ¿Cuáles son los mayores desafíos para el sector en 2021?

El principal desafío que tenemos como sector es lograr la seguridad jurídica, que es la base para la consolidación de proyectos y de ciudad. La inestabilidad en las normas y en los procesos solo ha generado desconfianza en los inversionistas y retrasos para la ciudad. El segundo desafío es la iniciación de más de 55 mil unidades de vivienda en la Región para 2021 y la aprobación de los Planes Parciales, generando empleo y una demanda en insumos de más de 22 billones de pesos y el tercero, por supuesto, es continuar profundizando el trabajo en equipo con las administraciones locales y departamentales en la consolidación de un sector sostenible y vital, como es el de la construcción. 

En 2020 manejaron el slogan #SomosUnGremioUnido, ¿cuál es la apuesta para que este año se continúe fortaleciendo este tema, así como la competitividad del sector?

Confianza, anticipación y trabajo en equipo fueron y serán los pilares que nos permitirán en los próximos años mantenernos como un sector competitivo que trabaja de manera articulada no solamente por la construcción de viviendas, sino de ciudades de calidad, tal y como ha sido la apuesta de este Gremio que tiene más de 60 años.