- Camacol Bogotá y Cundinamarca consultó a los hogares y visitantes de las salas de venta, lo que permitió proyectar la demanda potencial de vivienda en la región para los próximos doce meses en 94.484 unidades, así como los atributos de mayor peso para la decisión de compra. Los resultados del Estudio de Oferta y Demanda de Vivienda y No Habitacionales se presentaron hoy en el Seminario de Actividad Edificadora, evento que contó con alrededor de 400 asistentes.
Según los resultados arrojados por las más de 1.600 encuestas, el 52% de los hogares consultados en Bogotá tiene intención de comprar vivienda en los próximos 12 meses, y en Cundinamarca el 33,7%. De los hogares capitalinos interesados en adquirir vivienda el 32,8% ya ha empezado la búsqueda, y en el departamento la empezó el 18,2%. Entre los que manifestaron esta intención, se buscaron los que afirmaron contar con los recursos necesarios y un crédito preaprobado, y entre estos los que no registran reportes en centrales de riesgo, obteniendo así la demanda potencial para el próximo año, que sería un equivalente de 94.484 unidades.
“Esta demanda de vivienda se mantiene en niveles muy altos, lo que resulta muy positivo para el sector y para el bienestar de los habitantes de Bogotá y la región. Si bien hay variables como el comportamiento de las tasas de interés, que presentan algún ajuste, existe una sólida política de vivienda que nos permite seguir atendiendo los retos que impone la demanda”, explicó el gerente de Camacol Bogotá y Cundinamarca, Alejandro Callejas Aristizábal.
Según el rango de precio, el segmento de mayor demanda es el de interés social y prioritario, que corresponde al 40,1% del potencial total, lo que significaría 37.888 unidades VIS en la región durante el próximo año.
“Entre las cosas importantes que nos deja este estudio es que pudimos establecer que más del 82% de los compradores de la vivienda del segmento VIS son familias con ingresos de hasta 4 salarios mínimos. Esto, además de demostrarnos que esta oferta sí está llegando a quienes más la necesitan, plantea unos desafíos importantes para atender la creciente demanda para los hogares de menores ingresos. Creemos que los planes parciales son una herramienta eficaz para lograrlo”, dijo Callejas.
Sobre la ubicación de la vivienda que buscan las familias, el Estudio de Oferta y Demanda arrojó que las localidades de mayor demanda en Bogotá son Chapinero (15%), Usaquén (15%) y Engativá (9,1%). Por su parte, los cundinamarqueses buscan principalmente en Soacha (19,4%), Chía (20,7%) y Cajicá (19,2).
La ubicación es de lejos el aspecto más decisivo para los hogares de la región a la hora de comprar vivienda, pues es la motivación principal para el 51,3% de los encuestados, seguido por accesibilidad (11,6%), precio (10,6%) y el diseño de los espacios (6,5%). El principal destino de la compra es vivir en ella (75,4%), seguido de arrendarla (21,1%) y venderla (2,5%).
Por otra parte, la presidenta Ejecutiva de Camacol, Sandra Forero Ramírez, realizó un análisis del panorama nacional del mercado de vivienda. Mencionó los grandes objetivos de las propuestas que Camacol pone sobre la mesa para trabajar con el nuevo Gobierno Nacional, “hacer de Colombia un país sin déficit habitacional; reducir la pobreza mediante el acceso a la vivienda formal en entornos urbanos y rurales; construir ciudades de calidad, e impulsar la productividad, la sostenibilidad y el bienestar de los trabajadores", dijo la dirigente gremial.
Finalmente, Callejas destacó que materializar todo este potencial de viviendas representa mayores beneficios tanto para las familias que cumplen su sueño de tenerla, como para el desarrollo urbano: “Más que las mismas viviendas, con esta actividad construimos ciudad y sociedad. Cada proyecto de vivienda que se construye desde el sector formal le representa un gran aporte al urbanismo: hectáreas de suelo destinadas a parques, vías, equipamientos y cuidado de los elementos ambientales. Todo se traduce en bienestar para la región.